Saturday, June 10, 2006

El tiempo de otra tierra
Novela
Sol
28 Oct. 1999

No sé si te gustó la canción, pero fue mi pequeño ofertorio. Hace cuatro días hubo un concierto en nuestra ciudad; llegaron grupos de Lima y los hospedé en mi casa. Durante toda la tarde hablamos sobre lo extraño y maravilloso de las cosas; al anochecer, alistamos guitarras y enrumbamos hacia la plazoleta. En el escenario, cada uno dio lo mejor de sí. Nuestro grupo fue segundo. "Los ángeles no danzan, cantan", la primera canción.

Danzaron absortos como embuídos por un oído absoluto. Necesitaba, Eli, como todo el mundo, sentirme uno con el mundo. Fue como ir a un lugar antes distante e inimaginado. Hoy, una realidad inmediata. Ese día regresé de una prolongada ruptura con lo cotidiano. Había estado sumido en mi solipcismo, extraviado, irresoluto; era el atardecer de mi febril y atribulada adolescencia, entendí, entre dibujos y papeles en blanco. Entre música y un amor.

Canté como no lo había hecho nunca… Y llovió como nunca antes, sobre voces que, al unísono, clamaron por una canción, Mendigo del infinito. Sudé la miel de mi sangre. Una legión de abejas se apostaron, ebrias, en torno a los amplificadores. Y estas no son sólo palabras Elisa…

Al final, bajamos para formar parte de la masa, para sentirnos como ellos, para ser lo que son ellos hasta saciarnos de ellos, y morir intoxicados de vida…

"Nadie lo vio desembarcar en la unánime noche",

Tu entrañable César.

4 Comments:

Blogger Haymet said...

me encanta la manera en que manejas los detalles, como te expresas, .......sacas todo y lo presentas como un lienzo sobre la mesa,

7:40 AM  
Blogger CÉSAR CASTILLO GARCÍA said...

Gracias, me gustaron tus palabras

9:07 AM  
Blogger Clavel Rangel said...

¿A quien le escribes?

3:15 PM  
Blogger CÉSAR CASTILLO GARCÍA said...

Al género femenino, mi amor...

6:06 PM  

Post a Comment

<< Home